28 de septiembre de 2010

Bipolaridades I.

Hace humedad.

Terrible y maldita humedad en cada rincón de la ciudad.

No suelo contar confesiones.
Pero quizás la lluvia que fue lo amerite.

Soy dos al mismo tiempo. O varias, depende el día.
Hoy dos.
Sí. Seguro ya lo he dicho antes, así que no es nada nuevo.
Hace unas horas era yo. Y ahora soy esta. Que también soy yo.


En el medio de las dos he descubierto que me gusta un hombre
-terrible y maldita sinrazón-
y eso es nuevo para todas las que soy.

16 de septiembre de 2010

Rompiente.


Mi cuerpo no quiere ser trinchera.
Sino camino.
Puerto de partida o de llegada, da lo mismo. Pero puerto.
Que es parecido a puerta. Y ahí está la gracia.


Este cuerpo no quiere ser escudo. Ni cápsula. Y nido tampoco.
Sino rompiente.
Ola y océano.
El calor hermoso de verano. La simpleza del abrazo.


Este cuerpo quiere ser mío, asombrosamente, todos los días.
Y aquí se lo agradezco.

Pintura: La mujer desnuda, de Pablo Picasso.

13 de septiembre de 2010

Desvío.

Lo cierto es que no me sale decirte que no.
no ahora.
no cuando todo está a punto de cambiar.

te vibro, despacio.
mi pequeña incógnita.
mi hueco.
el beso, los besos, esos.

una pausa. un desvío.
el río al borde del abismo.
una calma de noche cualquiera.


siempre te veo.


y siempre me pregunto si viceversa.

2 de septiembre de 2010

Carajo.

Mandando a la reverenda mierda este empleo del ocote.

Y engrosando nuevamente las filas de desocupados de este hermoso país,
-bendito no, este blog carece de católicos-

Afirmo y reafirmo -dos veces-

Soy feliz, carajo.



(y hacía mucho que no, así que bienvenido sea)